Pesadillas y terrores nocturnos han sido una constante en mi vida. Durante la adolescencia también sufrí parálisis del sueño. No tuve a quien recurrir en busca de ayuda; no comprendía qué era aquello y por qué me sucedía a mí y al resto, no.  Siempre he tenido mucha sensibilidad por los animales que conviven con personas y por la naturaleza y el arte en todas sus expresiones. Las normas sociales y la estructura y valores de la sociedad que hoy tenemos nunca han disfrutado de mi simpatía. Siempre me he preguntado el porqué de todo y he sido una apasionada de las casualidades en mi vida.

Las respuestas las hallé en la física cuántica a través del reconocimiento de la multidimensionalidad. ¿Una expresión sencilla de esto?: somos más de lo que vemos, de lo que percibimos, de lo que nos han contado, y hay una rama de la física que explica todo ello: la física cuántica. ¿Te lo muestro de la manera sencilla y amena que yo lo percibo? Llama o escríbeme y concierta la primera consulta.

A día de hoy siento un gran júbilo por poder desenvolverme entre personas y, además, poder ayudarlas aportando algo de eso que llaman magia.